Hace
poco más de un año que se celebraron las elecciones municipales
sin que, desde entonces, se hayan cumplido las expectativas que todos
los grupos políticos prometíamos. La campaña electoral fue, como
todas, un concurso de ideas y de insultos; con unas, estábamos
seguros de que teníamos la clave para conseguir la felicidad de
todos los sonsecanos, con los insultos pretendían convencer a los
ciudadanos de que sólo ellos conocían las claves para resolver los
problemas.
Sin
embargo, desde IU ya advertimos de que probablemente no se podría
cumplir con muchas de las promesas y compromisos electorales. Cuatro
años de desgobierno, despilfarro y prepotencia del Partido Popular,
unido a la deuda pendiente de la Junta de Comunidades gobernada por
el PSOE, habían dejado un reguero de deudas y créditos que nos
hicieron pensar que la situación del Ayuntamiento podía ser
crítica, aunque nunca llegamos a imaginarnos el caos en el que se
habían convertido la organización y finanzas municipales.
Una
vez constituido el nuevo Ayuntamiento, se constató la situación,
confirmándose de forma sobrada las sospechas, tanto es así que una
de las primeras medidas que tuvo que adoptar el equipo de gobierno
fue pedir un crédito bancario para pagar las nóminas de los
trabajadores ya que las “arcas municipales” estaban vacías.
Ante
esta situación, Izquierda Unida presentó al Pleno Municipal la
moción “Pacto por Sonseca”, intentando conseguir el compromiso
de los 17 concejales para resolver, con el esfuerzo y colaboración
de todos, los viejos y nuevos problemas de Sonseca. La moción fue
aprobada por unanimidad aunque desde el momento de su aprobación
quedara convertida en papel mojado.
A
finales del año 2011, el PSOE nos presentó una propuesta de
presupuestos para el año 2012 que rechazamos de pleno ya que suponía
el despido de unos 20 trabajadores, incluyendo además la disminución
de jornada para algunos más.
No
nos quedamos en el simple rechazo, sino que trabajamos intensamente
en la elaboración de una propuesta alternativa con los siguientes
puntos esenciales:
- Mantenimiento de todos los puestos de trabajo.
- Disminución drástica de las partidas dedicadas a festejos.
- Revisión rigurosa de las partidas dedicadas a subvenciones y premios a asociaciones y particulares
- Análisis de la plantilla y funciones de los trabajadores del Ayuntamiento para conseguir un aprovechamiento eficiente y socialmente útil de los recursos de personal.
- Puesta en marcha de un Plan de Empleo Local, intentando paliar la supresión de los planes de empleo del Gobierno Central y de la Junta de Comunidades.
- Creación de un Banco Municipal de Alimentos
- Municipalización de la Escuela de Música
- Reducción de gastos corrientes (a título de ejemplo, proponíamos racionalizar el uso del teléfono que supone, desde hace varios años, unos 40.000 euros anuales)
- Supresión de alquileres de inmuebles y utensilios sin ninguna utilidad para el Ayuntamiento (18.000 euros anuales)
- Reclamación de las deudas contraídas por la Junta de Comunidades con el Ayuntamiento.
Tras
numerosas reuniones, propuestas y contrapropuestas, se llegó a un
principio de acuerdo que incluía una disminución en torno al 5% de
media, de los salarios de todos los trabajadores municipales, con
criterios de progresividad, es decir, a partir de mil euros en
función de lo que gane cada trabajador (los que más cobren mayor
porcentaje de descuento, sin ningún despido ni reducción de
jornada) y la aceptación, en lo esencial, de las propuestas
formuladas por Izquierda Unida.
Sin
embargo, como se dice habitualmente “El
hombre propone y Dios dispone”.
Antes de que el principio de acuerdo se hubiera plasmado en el Pleno
Municipal, el Gobierno Central se sacó de la manga un Plan de
Ajuste, que suponía una intervención clara y una reducción de la
poca autonomía que tenían los ayuntamientos y obligaba a éstos al
pago a los proveedores (pago con el que siempre hemos estado de
acuerdo, pero no al tipo que se ha impuesto, un 6%, cuando los
estados de la Unión Europea, a los bancos españoles, se les ha
proporcionó al 1%). Así, las alternativas eran nulas, ya que si no
se aceptaba, los ayuntamientos no podrían financiar el pago de las
deudas con los acreedores, autónomos y pequeños empresarios en su
mayoría, y dejarían de recibir las transferencias del Estado que
hasta ahora le corresponden por Ley (en torno al 15-20% de los
ingresos municipales).
El
Ayuntamiento estaba obligado a presentar un Plan de Ajuste ante el
Ministerio de Economía. El Pleno para aprobar dicho Plan se celebró
el 31 de marzo de 2012. Previamente se había celebrado la comisión
informativa en la que tras debatir el referido Plan, los servicios de
intervención del Ayuntamiento manifestaron que no había ningún
impedimento para mantener los salarios y la plantilla actual del
Ayuntamiento, a pesar de que el PSOE nos había presentado, hasta
entonces, unas cuentas que afirmaban lo contrario. Ante esta nueva
situación, se aprobó el Plan de Ajuste del Ayuntamiento de Sonseca,
junto con un acuerdo de los tres grupos municipales que incluía,
entre otros, el siguiente punto:
“Los
tres grupos políticos se comprometen a realizar, de común acuerdo,
los ajustes necesarios en el presupuesto municipal que se elabore y
apruebe para el ejercicio 2012 y siguientes, por el importe que sea
necesario para ajustar tanto dichos presupuestos, como las
necesidades de Tesorería de este Ayuntamiento, con el objetivo del
mantenimiento de los servicios y de los puestos de trabajo”.
No
obstante, veinte días después el Alcalde remitía a los grupos
municipales un informe del Interventor en el que ponía de manifiesto
la situación crítica del Ayuntamiento y la imposibilidad de cumplir
con lo que él había avalado unos días antes. Desde ese momento
quedaron suspendidas las reuniones de los grupos municipales, ya que
la situación tenían que resolverla los que la habían creado (la
irresponsabilidad del PSOE ante la demagogia del PP).
Acuciado
por los tiempos, el PSOE inició la elaboración unilateral de los
presupuestos, presionando a los trabajadores para que aceptaran una
disminución de jornada, aunque mantenían los gastos en festejos y
subvenciones. Consiguieron, con coacciones, que unos veinte
trabajadores firmaran una reducción de jornada. Con esta disminución
de gasto nos convocaron para llegar a un acuerdo de aprobación de
los presupuestos municipales. La respuesta de Izquierda Unida fue
clara y rotunda: esos presupuestos vulneraban el acuerdo suscrito por
los tres grupos políticos, por lo que para iniciar la discusión de
los mismos, y su posible aprobación, considerábamos que era un
requisito imprescindible que los tres grupos municipales anularan el
acuerdo firmado.
El
PSOE hizo caso omiso y el 5 de junio convocó un Pleno para la
aprobación de los presupuestos, que fueron aprobados por 8 votos a
favor (PSOE) y 6 votos en contra (uno de Izquierda Unida y cinco del
PP). Tres concejales del PP tuvieron algo más importante que hacer
que participar en el Pleno de mayor trascendencia de la vida
municipal y en consecuencia no acudieron y, con su ausencia, dieron
por roto el acuerdo suscrito entre los tres grupos municipales y
permitieron la aprobación de los presupuestos del año 2012.
Después
del Pleno, el PP presentó alegaciones de carácter político a los
presupuestos aprobados, aún sabiendo que las alegaciones a las
decisiones del Pleno sólo pueden formularse en el supuesto de
vulneración de la legalidad. Así consta en el informe negativo del
Interventor en el Pleno celebrado el 14 de agosto de 2012 para
debatir las reclamaciones presentadas por el PP; tal como dice la
Ley, sólo se pueden presentar alegaciones y reclamaciones al
presupuesto aprobado por el Pleno del Ayuntamiento cuando concurren
alguna de las siguientes razones:
- Por no haberse ajustado su elaboración y aprobación a los trámites legales.
- Por omitir el crédito necesario para el cumplimiento de las obligaciones exigidas a las Entidades Locales.
- Por ser de manifiesta insuficiencia los ingresos con relación a los gastos presupuestados.
Es
difícil creer que personas que han gobernado durante cuatro años el
Ayuntamiento desconozcan la normativa básica municipal, aunque visto
lo visto no es de extrañar. En cualquier caso, la ignorancia, el
orgullo y la irresponsabilidad del grupo del PP, no les impiden
utilizar cualquier marrullería obstruccionista para provocar el caos
y la quiebra en el Ayuntamiento de Sonseca. Aunque se les llene la
boca de sonsecanismo barato, no les importa para nada Sonseca, sólo
les importa el PP; son capaces de pasar a todos por la izquierda para
intentar tapar su fracaso electoral y la nefasta y despótica gestión
municipal.
Previamente
a ese Pleno se había celebrado la correspondiente Comisión
Informativa, en la que los tres grupos municipales conocimos la
crítica situación económica en la que se encuentra el Ayuntamiento
de Sonseca; una situación que se agravaría si se dilatara en el
tiempo la aprobación definitiva de los presupuestos e impediría
pagar las nóminas de los trabajadores en los próximos meses.
La
propuesta del PSOE (mal formulada) nos situaba ante la tesitura de
aprobar una propuesta del PP que estaba en contra de la Ley, aunque
simultáneamente rechazáramos unos presupuestos con los que ya
estuvimos en desacuerdo en su día, aunque las circunstancias se
habían modificado sustancialmente.
Actuar
de esa manera, es decir aprobar la propuesta del PP, hubiera
significado:
- Sumir al Ayuntamiento en el caos
- Dejar sin crédito al Ayuntamiento para hacer frente al pago de las nóminas y los compromisos adquiridos con los acreedores
- Participar, con el PP, en una forma mezquina de hacer política que no compartimos.
Por
eso decidimos que la postura responsable era la “Abstención”,
siempre
y cuando el PSOE se comprometiera a iniciar de inmediato la discusión
de las alegaciones
tanto del Comité de Empresa como del PP, así como las que IU
formuló en ese mismo Pleno:
- Formulación y Ejecución de un Plan de Empleo Local
- Revisión de todas las Subvenciones
- Creación de un Banco de Alimentos
- Revisión de reducciones de horario
El
PSOE se comprometió a todas las propuestas, lo que determinó que IU
se abstuviera, salvando así una situación muy difícil para el
Ayuntamiento y para los trabajadores y permitiendo la revisión de un
presupuesto con el que no estamos de acuerdo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario